El sábado, la preparación del Chelsea para la nueva temporada, en la que defenderá tres títulos nacionales, llegará a su punto álgido. Los Blues jugarán su último amistoso de pretemporada ante su afición en Kingsmeadow, que presenció una campaña invicta sin precedentes en el primer año de Sonia Bompastor al mando.
Chelsea did not lose a game in the Women’s Super League, FA Cup or League Cup as they scooped up an incredible treble in 2024-25, each player and staff member etching their name into the history books in the process. But they were not content. A Liga de Campeones semi-final defeat to Barcelona left the Blues unsatisfied despite the amazing work done across the board, as that trophy once again eluded them. That it instead landed in the hands of London rivals Arsenal Sólo habrá aumentado el dolor y la motivación para luchar por el título europeo esta vez.
It’s fair to say that it is a compliment to AC Milan, then, to have been chosen as the opponents for Chelsea’s final game before another highly-anticipated season kicks off next Friday, at home to Manchester City. The Rossonere have a young team – in that it was founded just seven years ago and also because it had the third-youngest squad in Serie A last term. But that it has been cherry-picked as the final test for Bompastor’s winning machine, a year on from playing three-time European champions Barcelona in the Joan Gamper Trophy, suggests it is doing something right…
El sábado, la preparación del Chelsea para la nueva temporada, en la que defenderá tres títulos nacionales, llegará a su punto álgido. Los Blues jugarán su último amistoso de pretemporada ante su afición en Kingsmeadow, que presenció una campaña invicta sin precedentes en el primer año de Sonia Bompastor al mando.
El Chelsea no perdió ningún partido de la Superliga Femenina, la FA Cup ni la Copa de la Liga al conseguir un increíble triplete en la temporada 2024-25, con cada jugadora y miembro del cuerpo técnico grabando su nombre en los libros de historia. Pero no estaban satisfechos. Una derrota en semifinales de la Champions League contra el Barcelona dejó a los Blues insatisfechos a pesar del increíble trabajo realizado en todos los ámbitos, ya que el trofeo se les escapó una vez más. Que en cambio cayera en manos de su rival londinense, el Arsenal, solo habrá aumentado el dolor y la motivación para luchar por el título europeo esta vez.
Es justo decir que es un elogio para el AC Milan haber sido elegido rival del Chelsea en su último partido antes del inicio de otra temporada tan esperada el próximo viernes, en casa contra el Manchester City. Los Rossonere tienen un equipo joven, ya que se fundó hace apenas siete años y también porque contó con la tercera plantilla más joven de la Serie A la temporada pasada. Pero que haya sido elegido con esmero como la prueba final para la máquina de ganar de Bompastor, un año después de enfrentarse al Barcelona, tricampeón de Europa, en el Trofeo Joan Gamper, sugiere que algo está haciendo bien...
There are not many bigger clubs in world football than Milan. Only Real Madrid have won more European Cups on the men’s side, and only Juventus have enjoyed more success in the Italian domestic game than the Rossoneri. It’s a club synonymous with the big stage, big players and big titles.
Now, it is looking to build success on the women’s side. Most clubs in Serie A Femminile are very young, with Italy a little behind other European nations in the women’s football world despite having more historic roots in it than most. Alongside Milan, all of Juventus, Roma and Enterrar También fundaron su equipo femenino en 2017 o después, y solo tres clubes de la máxima categoría de esta temporada se establecieron antes de 2014.
But there has been a lot of growth in the last six years in particular, starting with Italy’s surprise run to the Women’s World Cup quarter-finals in 2019. Both Juventus and Roma have made a splash in the Champions League since then, putting up good fights against Lyon and Barcelona in their respective maiden quarter-finals, while the Azzurre put women’s football even more firmly on the map across the nation this past summer with their run to the Euro 2025 semi-finals.
Like many, Suzanne Bakker, head coach of Milan, hopes Italy’s success in Suiza can have a positive impact on the domestic league and the interest in it across the country. But the majority of her focus this past summer has been on how the Rossonere can improve and muscle in on the chase for silverware that has largely been dominated by Juventus and Roma in this new professional era of Italian women’s football.
El Milan contaba con dos jugadoras en la selección italiana de la Eurocopa 2025, la portera Laura Giuliani y la defensa Julie Piga, y al preguntarle a Bakker qué pueden aportar a su equipo, que terminó quinto en la Serie A la temporada pasada, surge una respuesta interesante. "Uno de sus éxitos fue ser un equipo, y así juntos podemos alcanzar un nivel realmente alto. ¿Qué significa eso? ¿Ser un equipo y ser un jugador de equipo?", reflexiona, hablando con BALLGM antes del viaje del club a Inglaterra para enfrentarse al Chelsea.
Ahora, en la pretemporada, todos están contentos porque todas las jugadoras están jugando, pero se ve que cuando están decepcionadas, o quizás por una lesión, o quizás juegan menos, se ve la verdadera actitud de una jugadora. Entonces necesitamos a todos los profesionales, creo, y ellos pueden ayudar, porque Laura era, por supuesto, la portera titular, pero Julie era más bien una suplente, pero entra y también es muy valiosa para el equipo, porque a veces se olvida que no solo las jugadoras que juegan en el campo son importantes.
Es todo el equipo y cada jugador tiene su propia calidad. Algunos se esfuerzan a diario en la cancha, y quizás jueguen menos minutos, pero son muy importantes. Los otros jugadores, que quizá lleven mucho tiempo lesionados, también pueden aportar la mentalidad adecuada a otros que se quejan por jugar menos. Creo que a veces lo olvidamos. Pueden aportar esa experiencia y también esa alta intensidad, lo que significa jugar al máximo nivel en Europa. Pueden transmitir eso a los demás jugadores, y lo están haciendo porque ambos son líderes en nuestro equipo.
Es una reflexión interesante sobre cómo un verano dorado para Italia puede conectar con la próxima temporada del Milán, ya que, en realidad, hay más diferencias que similitudes entre ambos equipos. Esto se aplica especialmente al estilo de juego.
Los antecedentes de Bakker están dominados por Áyax, club donde entrenó a la sub-19 durante cuatro años antes de asumir el cargo de primer equipo en 2022. En dos temporadas al mando, guió al club a su tercer y más reciente título de liga, la Copa de Holanda y sus primeros cuartos de final de la Liga de Campeones Femenina. Casualmente, el Chelsea fue el rival, que se alzó con la victoria en dos partidos, el segundo de los cuales terminó con un empate a uno.
Cuando el Milan buscaba un nuevo entrenador el año pasado, Bakker fue el centro de atención. En la primera conversación entre ella y el club, la holandesa preguntó qué se esperaba de ella en cuanto a estilo de juego, y la respuesta fue que querían que aportara lo aprendido en el Ajax, un club con una filosofía universalmente venerada.
Es comprensible que exportar ese estilo de fútbol único presente desafíos. El Ajax se apoya fuertemente en una cantera donde todos sus jugadores de la academia pasan años aprendiendo este estilo y, por lo tanto, llegan a comprenderlo a fondo. En Milán, Bakker tiene que empezar desde cero. "Requiere más tiempo", reconoce.
Pero el progreso en ese sentido ha sido revelador tanto dentro como fuera de la cancha. En la Serie A Femminile, la división se divide en dos durante los dos últimos meses de la temporada, lo que significa que los cinco primeros equipos se enfrentan entre sí en casa y fuera durante la recta final de la campaña, mientras que los cinco últimos se enfrentan dos veces más. Es una racha de partidos brutal, especialmente para los de la mitad superior, dado el nivel de rivales a los que se enfrentan cada semana, pero es un buen aprendizaje para un equipo como el Milan, que intenta acortar distancias con la Juventus y la Roma.
Los jugadores ven el nivel necesario y están a la altura, como lo hizo el Milan al perder solo dos de esos ocho partidos. "Con todo respeto a los [cinco últimos equipos], la intensidad es diferente", comenta Bakker. "Todos los jugadores tienen mucha más información y experiencia [de eso], lo que les será útil esta temporada".
Cuando la entrenadora se sentó con sus jugadoras después de terminar su primera campaña, recibió más indicios de que las cosas iban en la dirección correcta.
“Les gusta cómo jugamos”, explica Bakker. “Para ser sincero, durante los primeros meses nos llevó demasiado tiempo encontrar las conexiones adecuadas en el campo. Para mí y para algunos miembros del cuerpo técnico, era algo nuevo. Hay 26 jugadores y solo conozco a dos de Países Bajos, y los conozco muy poco. Entenderlos y también lo que significa jugar en la Serie A es totalmente diferente a jugar en Países Bajos, por ejemplo. Aprendimos mucho en las primeras semanas, pero también lleva demasiado tiempo y perdimos algunos puntos.
Pero si ves cómo terminamos la competición contra los cuatro mejores equipos, somos competitivos. Se nota en los resultados y también en cómo queremos jugar. Estoy muy orgulloso de ello.
El trabajo de Bakker también ha captado claramente la atención externa. El Milan fue invitado por el Barcelona a participar en el Trofeo Joan Gamper el año pasado, y si bien esto ocurrió mientras la holandesa se preparaba para su primera temporada al mando, se produjo tras su ascenso tras la clasificación del Ajax para la Champions League. Ahora, el Chelsea ha identificado a los Rossonere como la prueba final perfecta para su dominante equipo, mientras los Blues se preparan para una gran temporada que arranca con uno de los partidos más complicados posibles, contra el City. Es otra gran oportunidad para este joven Milan.
“I think that we deserve that maybe, if you look at our performances in the last games of the last season,” Bakker says. “I think it’s important for us. Of course, we are a good team but Chelsea showed in the last seasons that they’re a great team. They play every year in the Champions League, every year they make it to maybe the quarter-final or semi-final, and also if you look to their players and if you compare with our players, who have one year experience in Serie A or with the U23 nacional team, I think all the players of Chelsea played five or maybe 10 years for the national team. To compare ourselves with that level, that helps us. I’m very happy that we have the invitation from Chelsea, that we can measure ourselves with them.”
Esto le presentará al Milan un desafío diferente que puede ayudarlos en las últimas etapas de la Serie A y también en las competiciones de copa, cuando jueguen contra equipos de primer nivel que privarán a los Rossonere de la posesión que desean.
“Hay momentos en los que no podemos jugar como queremos normalmente, porque también tenemos que ser realistas”, dice Bakker, anticipando el encuentro del sábado. “Entonces, quizás se trate más de cómo defender si tienes menos posesión del balón. En la liga, queremos tener más posesión del balón, pero también sabemos que a veces hay situaciones en el partido, o un impulso en el juego, en las que hay que retroceder más en un bloque más bajo. Ese es, entonces, el objetivo de ese amistoso”.
En esencia, es solo un amistoso, pero es solo una pequeña parte de un panorama más amplio para Bakker y su equipo, el Milan. A Bakker le gusta trabajar en los detalles. El club tiene grandes objetivos por los que trabajar, concretamente conseguir el primer trofeo para el equipo femenino y clasificarse para la Champions League.
“Pero para mí, como entrenador, cada vez que pienso en el próximo partido, busco minimizar los goles”, dice Bakker. “Todos sabemos que queremos ganar ese partido, pero para mí, la clave está en cómo podemos ganarlo. Se trata de concentrarnos en qué hacer. ¿Cuál es la siguiente acción? Eso es lo que hacemos todos los días. Porque un partido no se gana el día del partido. Un partido se gana todos los días, y no solo en la cancha, sino también fuera de ella, cuando estás en casa y piensas en dormir, en comer. En eso nos centramos todos los días.
El Milan es un gran club masculino, un club con mucha historia, y queremos que el equipo femenino también lo sea. Pero solo se puede lograr si se ganan muchos partidos, y luego vuelvo a nuestros objetivos a corto plazo.
Este fin de semana, la atención a corto plazo de Bakker y el Milan se centra en el Chelsea, Bompastor y en cómo superar a sus Blues para lograr un buen rendimiento y obtener un buen resultado que ayude a preparar a las Rossonere para los retos que les aguardan esta temporada. El Chelsea ha hecho de ganar trofeos y disputar grandes partidos europeos la norma en los últimos 10 años. Mientras el Milan se esfuerza por disfrutar de ese éxito, está a punto de vislumbrar cómo funciona uno de los mejores equipos del fútbol femenino.
"Sin duda, aprenderemos mucho", dice Bakker al despedirse. "Estamos deseando que llegue".
